Los familiares de Samara Cerpa Avendaño están sumidos en el dolor. Amanecieron con la tristeza de que más nunca verán sonreír a la adolescente, de 14 años.

"Ella normalmente salía en la tarde, pero ayer el colegio los soltó temprano y se montó en la buseta para irse a la casa. La buseta la deja cerca de la casa. Iba con una compañera, quien iba en la ventanilla y Samara iba en la silla del pasillo cuando la bala entró y la impactó", contó una tía en la mañana de este viernes en Medicina Legal.

La mujer era la que se notaba más calmada de todos los familiares. La mayoría, entre ellos el papá de la adolescente, lloraban sin cesar por esta pérdida. 

"El tiro lo recibió en el corazón. Cuando la llevaron al Hospital ya iba sin signos vitales", contó la tía.

Samara era una buena estudiante, emprendedora y tenía un don para dibujar.

"Era una artista, le gustaba pintar. Pintaba muchos paisajes. Su cuarto lo tiene bien bonito de dibujos", contó.

La adolescente en junio del próximo año iba a cumplir sus 15 años y desde ya estaban los familiares organizando como sería esa fiesta.

Sin embargo, la inseguridad en Barranquilla terminó con quitarle la oportunidad a Samara de vivir su quinceañero y de disfrutar esa fecha importante al lado de los suyos.

Hay indignación entre familiares, amigos, compañeros de clases, vecinos y de toda la ciudadanía barranquillera por este vil crimen.

Una nueva vida inocente se ha perdido por culpa de los delincuentes que buscan obtener dinero de manera fácil. Su avaricia por la plata no los lleva a dimensionar el daño irreparable que le han ocasionado a esta familia. 

Samara estaba estudiando noveno grado en el colegio María Auxiliadora, en el barrio La Magdalena, donde ocurrió la balacera.

Lo que hasta el momento han establecido las autoridades es que un ciudadano había retirado una fuerte suma de dinero de un banco del centro comercial Panorama y al llegar al barrio La Magdalena fue interceptado por fleteros en motos.

Fue allí cuando se inició un intercambio de disparos entre los delincuentes y su víctima. 

En ese instante pasaba la buseta de La Carolina donde se transportaba Samara con su compañera y una bala 'perdida' la impactó a ella al igual que un hombre de 73 años que iba también de pasajero.

En la misma buseta, la adolescente y el adulto mayor fueron llevados al Hospital Universidad del Norte, donde se confirmó la muerte de la menor de edad mientras que el adulto quedó herido con un bala en una de sus piernas.

La Gobernación del Atlántico, la Alcaldía de Barranquilla y la Policía Metropolitana están ofreciendo una recompensa de hasta 50 millones de pesos para quien suministre información que conlleve a capturar a los fleteros que ocasionaron esta tragedia.